El Colegio de Gestores Administrativos de Málaga celebra su tradicional Copa de Navidad

El Colegio de Gestores Administrativos de Málaga ha celebrado hoy, en el Palacio del Limonar, su tradicional Copa de Navidad, un encuentro distendido con el que el Colegio quiere agradecer, por un lado, a los colegiados su confianza en la institución y, por otro, a las autoridades su disponibilidad por tener siempre las puertas abiertas. Sin formalismos. “Es un encuentro entre amigos, entre compañeros, entre instituciones, tan solo nos reunimos en torno a un brindis navideño para mostrar nuestra gratitud a todos los que nos ayudan a ejercer nuestra labor con profesionalidad. Gracias a todos por su tiempo y generosidad”, ha agradecido Daniel Quijada, presidente del Colegio.

Al encuentro, que ha comenzado a las 13:30 horas, han asistido, entre otros, Rafael Pérez Peña (decano de cónsules), Marisa Moreno (cónsul de Dinamarca) y Arnulf Braun (cónsul de Alemania) por la estrecha relación que mantienen los gestores administrativos con los consulados de provincia. También han brindado por el nuevo año Susana Carillo (teniente alcalde del Ayuntamiento de Málaga); Cristóbal Torres (gerente de la Agencia Tributaria de Andalucía), Aida Vilaret (jefa provincial de la DGT), Rocío García (presidenta de AMUPEMA), Marta Izquierdo (jefa de Trabajo e Inmigración de la Subdelegación del Gobierno) y Óscar Bujalance (director provincial en Tesorería General de la Seguridad Social).

La Universidad de Málaga, cuna de talento, ha estado representada por varios decanos, entre ellos, Juan José Hinojosa (decano de la Facultad de Derecho) y Benjamín del Alcázar (decano de la Facultad de Comercio y Gestión).  Han compartido el encuentro compañeros de otros colegios profesionales como el de Administradores de Fincas, Graduados Sociales, Peritos e Ingenieros y Procuradores. Y como Navidad es sinónimo de solidaridad, nos han acompañado también representantes de varias asociaciones malagueñas.

La cita, que ha contado con un centenar de invitados, ha sido especialmente emotiva, ya que el año pasado el Colegio se vio obligado a suspenderla a tan solo dos días de la celebración por la irrupción de la variante ómicron. Con la normalidad recuperada, “ha sido un verdadero lujo contar con el apoyo de tantas personas con las que trabajamos diariamente. Estos momentos nos ayudan conocernos mejor y a afianzar lazos”, añade Quijada.